El año electoral que se avecina se convertirá en un termómetro para medir el futuro del AN. Por ello Rafael Roncagliolo apunta la imperiosa necesidad de aprobar el pacto de mediano plazo.
“Me parece importante suscribir este compromiso porque si un año antes de las elecciones las fuerzas políticas se ponen de acuerdo en un conjunto de medidas que deberá aplicar el próximo gobierno, ello sería un estupendo mensaje al país y una contribución para la calidad de la campaña”, puntualizó.
Para Federico Arnillas, de la Mesa de Concertación de Lucha contra la Pobreza, el 2005 va a suponer volver a mirar la existencia del AN. “Se vienen tiempos difíciles, pues una coyuntura electoral no suele ser un buen contexto para trabajar acuerdos. Esto puede ser un obstáculo para el AN o una oportunidad. En este país impredecible alguien ha dicho que siempre encontramos las soluciones perfectas, solo que cinco minutos tarde; en este caso, tenemos la oportunidad de hallarlas cinco minutos antes”, comentó.
David Lemor, postulante a la secretaría técnica, considera importantísimo el reto que enfrenta el AN. “No solo para mantener el nivel de la discusión política, sino para insistir en que los partidos tomen en cuenta lo acordado en las políticas del AN para la formulación de sus planes de gobierno”.
Fuente: El Comercio
Fecha: Viernes 27 de diciembre de 2004